En el contexto de su extensión hasta el 2027, el Intercambio de Conocimientos e Innovación (KIX) de la Asociación Mundial por la Educación (GPE), un esfuerzo conjunto con el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC) de Canadá, está ofreciendo extensiones presupuestadas a una selección de sus actuales proyectos de investigación aplicada. Tras un proceso competitivo, el proyecto Innovaciones en el uso de datos para sistemas de información para la gestión de la educación (EMIS) en Gambia, Uganda y Togo es uno de los seleccionados.
Contexto
Las políticas y los programas educativos mundiales deben basarse en datos y pruebas. Sin embargo, aunque existen datos en muchos países de renta baja y media (PRMB), a menudo no se recopilan de forma sistemática, no cumplen las normas internacionales de presentación de informes y/o se desaprovechan en los sistemas educativos nacionales. Se ha reconocido con rotundidad la necesidad de contar con un sistema de información para la gestión de la educación (EMIS, por sus siglas en inglés) "listo para usar" que pueda adaptarse adecuadamente a las necesidades de la región. Los sistemas de información sanitaria de código abierto, como DSIH2, brindan la oportunidad de crear un EMIS de este tipo.
Este proyecto adapta la plataforma DSIH2, una innovación probada en el sector sanitario, para utilizarla como EMIS en Gambia, Uganda y Togo. Como sistema de información de gestión de código abierto basado en la web y utilizado para la captura, el procesamiento, la visualización y la difusión de datos rutinarios para la administración de la sanidad pública, DSIH2 presenta una oportunidad para construir una base de datos a la que se pueda acceder y utilizar en los distintos niveles del sistema educativo de cada país.
Resultados hasta la fecha
En la implantación de la plataforma hasta ahora, cada país ha podido crear aplicaciones web y Android que se adaptan a las necesidades locales, dada la naturaleza de código abierto de DSIH2. El proyecto ha creado un ecosistema de plataforma digital para permitir el intercambio de conocimientos e innovación entre las partes ejecutoras. También apoyó el uso de la plataforma DSIH2 para vincular los datos de salud y educación para los datos de vigilancia de COVID-19 basados en la escuela en Uganda. Disponer de una plataforma de datos armonizada y centralizada permitió dar respuestas políticas colaborativas y basadas en datos con la participación de todas las partes interesadas. Además, gracias a los datos de matriculación recopilados a través de la plataforma, los responsables de la toma de decisiones pudieron elaborar presupuestos más precisos y fundamentados sobre diversas subvenciones de capitalización. En Gambia, la aplicación de la plataforma ha permitido al Ministerio de Educación basarse en datos identificables individualmente para intervenciones sobre necesidades especiales, en consonancia con la política nacional que exige una planificación educativa individualizada para los alumnos con necesidades especiales. Estas innovaciones ya se están modificando y describiendo en términos más generales para que puedan ser utilizadas por otros agentes educativos que interactúen con la plataforma DSIH2.
Próximos planes
Aunque ya se ha demostrado que es posible compartir conocimientos cuando se utiliza esta plataforma como EMIS, la ampliación garantizará que el uso de datos EMIS se siga ampliando y sea más eficiente. En los tres países de ejecución originales, este proyecto continuará sus esfuerzos para permitir la toma de decisiones basada en datos a nivel local, adaptando aún más la plataforma a los nuevos tipos de datos educativos que se han vuelto relevantes, así como al tipo de usuario que podría interactuar con ellos. Más allá de estos tres países, el proyecto se ampliará a Sierra Leona, Mozambique y eSwatini, implicando y apoyando a las partes interesadas locales en su aplicación. En cuanto a sus ambiciones de colaboración internacional, el proyecto seguirá colaborando con sus grupos de trabajo internacionales de múltiples socios para desarrollar productos de información y directrices normalizados. Aunque éstos sólo deben utilizarse como punto de partida, pueden potenciar la acción local mediante el uso colaborativo de los datos.
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