Más del 90% del desarrollo cerebral de los niños se produce en los cinco primeros años de vida. Los niños que reciben una atención y educación de la primera infancia (AEPI) de calidad están mejor preparados no sólo para la escuela primaria, sino también para el aprendizaje permanente y el bienestar socioemocional. Las pruebas demuestran que la AEPI es también una inversión inteligente, que aumenta la eficacia del sistema educativo y refuerza el desarrollo económico gracias a un mayor poder adquisitivo. Por ello, la AEPI se ha convertido en una prioridad para muchos responsables de las políticas educativas de los países socios de la Alianza Mundial por la Educación (AME). Como resultado, el Intercambio de Conocimientos e Innovación (KIX) de la GPE, un esfuerzo conjunto con el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC) de Canadá, ha trabajado para fortalecer la atención y educación de la primera infancia desde su inicio en el 2019. Tras el anuncio de su extensión hasta el 2027, KIX encargó un estudio de alcance independiente para identificar las principales brechas de conocimiento y las necesidades de investigación relacionadas con la AEPI, para informar las nuevas actividades de investigación e intercambio de conocimientos apoyadas por KIX en los países socios de la GPE.
El estudio proporciona un panorama actualizado tanto de los avances como de los retos actuales relacionados con la AEPI. Señala el amplio reconocimiento de la importancia de la AEPI en los marcos globales, y los beneficios y retos asociados con una amplia gama de enfoques utilizados para ofrecer programas de AEPI. A pesar de que en todo el mundo se comprende el papel fundamental que desempeña la AEPI en el desarrollo del niño, aproximadamente la mitad de los niños del mundo en edad preescolar no están matriculados en centros de AEPI. Persisten los problemas relacionados con el acceso equitativo al aprendizaje temprano y la calidad de la AEPI para preparar a los niños para la escuela primaria.
Este documento reconoce la igualdad de género y la inclusión social, así como la educación en situaciones de emergencia, como temas transversales clave para la AEPI. Dado el profundo impacto de la AEPI en el futuro de los niños, ésta tiene el potencial de reducir o exacerbar las desigualdades. Se necesita más investigación para comprender los tipos de servicios de AEPI que se requieren para satisfacer las demandas de familias diversas, y cómo ampliar y sostener modelos prometedores de AEPI, incluso mediante una mayor financiación gubernamental y un mayor apoyo de los padres a la AEPI. En cuanto a la calidad, es necesario seguir investigando sobre modelos innovadores de acreditación para la AEPI, así como sobre las normas de cualificación de los profesores y la pedagogía y evaluación de la AEPI. Las actuales deficiencias en la base empírica de la inclusión en la AEPI también deben abordarse mediante futuras investigaciones.
Para más información, lea el documento de trabajo completo: Atención y educación de la primera infancia: Documento de trabajo del estudio exploratorio de KIX de la GPE | GPEKIX
